Washington. El presidente Donald Trump elevó la presión sobre los gobernadores tras una semana de disturbios provocados por la muerte de George Floyd al exigir el martes que Nueva York llame a la Guardia Nacional a reprimir a los “malvivientes y perdedores”.
Tras la séptima noche de manifestaciones pacíficas y actos de vandalismo, ataques a la policía y robos, el presidente amplió sus reclamos de mano dura de la víspera, en los que amenazó con llamar a las fuerzas armadas a imponer el orden si los gobernadores no lo hacen.
“NYC, LLAMA A LA GUARDIA NACIONAL”, tuiteó. “Los malvivientes y perdedores te están destrozando. ¡Actúa rápido! No cometas el mismo error horrible y fatal que cometiste con hogares de ancianos”.
En Nueva York el lunes por la noche la gente rompió escaparates de tiendas cerca del Rockefeller Center y derribaron la puerta de la tienda departamental Macy’s a pesar del toque de queda, el primero que declara la ciudad en décadas. La policía detuvo a unas 700 personas e informó que varios agentes resultaron heridos.
Nueva York y otras ciudades se preparaban para nuevos disturbios por la noche, y el alcalde Bill de Blasio extendió el toque de queda a partir de las 8 de la noche para toda la semana.
“Tendremos unos días difíciles”, dijo, y pidió ayuda a los líderes comunitarios: “Creen la paz… Pónganse de pie”, les dijo.
Veintinueve estados han convocado a más de 20 mil efectivos de la Guardia Nacional para reprimir los disturbios, pero Nueva York no es uno de ellos. De Blasio ha dicho que no quiere la Guardia Nacional, y el gobernador Andrew Cuomo dijo que no la enviará a la ciudad si el alcalde no lo quiere.
Durante la violencia que se registró en ciudades de costa a costa el lunes por la noche, agentes de policía fueron heridos de bala, atropellados y atacados con piedras y botellas.
En Filadelfia, cientos de manifestantes bloquearon una autopista en el centro de la ciudad. En Atlanta, la policía lanzó gases lacrimógenos. En Nashville, más de 60 efectivos de la Guardia Nacional bajaron sus escudos a pedido de los manifestantes pacíficos. Y en una manifestación en Buffalo, Nueva York, en SUV atropelló a un grupo de agentes de policía y lesionó a tres.
“Hemos estado sentados sobre un polvorín desde hace algún tiempo y ha estallado”, dijo la comisionada de policía de Filadelfia, Danielle Outlaw.
Fuente: La Jornada