Ciudad de México. Ante la falta de recursos físicos e infraestructura tecnológica en materia educativa, no es posible cumplir con todo el plan todo el plan de estudios, con todos los programas y todo el curriculum establecidos, por lo que es necesario replantear la expectativa de aprendizaje y definir nuevas prioridades curriculares.
Lo anterior lo expresaron las especialistas Ana Eugenia Garduño Whitson e Irina Edith González Flores, al impartir la conferencia virtual “Desafíos y Perspectivas de la Educación Pública”, organizada por el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), para sus dirigentes nacionales y seccionales.
Desde su visión, los efectos de la pandemia “pueden ser devastadores” entre los sectores marginados, al ampliar la brecha educativa y económica, por lo que es urgente diseñar nuevas estrategias dirigidas a estos grupos.
En un mensaje inicial, el secretario general del SNTE, Alfonso Cepeda Salas, destacó que aun cuando el 21 de marzo se cerraron las escuelas de todo el país, no se canceló el proceso educativo, gracias a que los docentes reafirmaron su gran capacidad para mantener contacto con sus alumnos.
Ante más de 3 mil 500 agremiados, que se sumaron vía electrónica, Cepeda Salas subrayó que “de forma inimaginada, las maestras y los maestros mantuvieron vivo, no solo el sistema educativo, sino la fuerza de la esperanza de que venceremos la pandemia. En esta compleja realidad en que nos encontramos, la sociedad ha revalorizado a sus maestros, ha reconocido en su justa dimensión su valor de educar”.
Ana eugenia Garduño, especialista en Práctica Docente, y quien ha desempeñado diversos cargos en organismos nacionales e internacionales, se refirió a la imposibilidad de cumplir con todo el plan de estudio, programas y curriculum, en un contexto donde no sólo hace faltan recursos físicos e infraestructura tecnológica, sino además en que la educación estaba diseñada para ser impartida de manera presencial.
Para la educación en línea y a distancia, recomendó establecer rutinas adaptadas a la nueva situación. Explicó que “la rutina, además de establecer orden, ayuda a reducir estrés y ansiedad; la rutina da certidumbre”.
En tanto, González Flores, maestra en Política Internacional Educativa, quien ha publicado más de 30 libros sobre enseñanza, destacó el cambio que debe tener el rol de los educadores en este nuevo contexto. “Ya no somos solo docentes, somos facilitadores del aprendizaje. Eso nos hace también poder crear y adaptar soluciones para ir empoderando poco a poco a nuestros alumnos a que sean dueños de su propio aprendizaje”.
Agregó que es necesario reforzar la educación socioemocional para crear resiliencia en los alumnos; que puedan autorregularse y desarrollar su capacidad de trabajo independiente, para continuar su aprendizaje en cualquier contexto y condición.
En un comunicado del SNTE, se señala también que las especialistas coincidieron en que, pese a los déficits de infraestructura, equipamiento y conectividad en los hogares, la educación a distancia fue posible gracias al esfuerzo de los maestros. Asimismo, recordaron que más de mil millones de estudiantes, en escuelas de 129 países, suspendieron actividades, lo que repercutirá en su aprendizaje.
Este encuentro virtual formó parte del seminario “Ante el Desafío de un Nuevo Tiempo”, que continuará durante esta semana, con especialistas en Economía, Sociedad y Trabajo.
Fuente.La Jornada