Miami, 1 jul (EFE).- La cifra diaria de casos nuevos de la COVID-19 en Florida subió este miércoles a 6.563, superior a la del martes pero lejos del récord del pasado sábado (9.585), en medio de la preocupación por un posible desborde de la capacidad hospitalaria en Miami-Dade si continúan creciendo los contagios.
En los cuatro meses transcurridos desde que la pandemia llegó a Florida, que se cumplen hoy, ha habido 158.997 contagiados y 3.550 muertos, según las cifras del Departamento de Salud de Florida.
La agencia estatal detalló además que 1.867 personas han muerto en los centros geriátricos de Florida, entre residentes y aquellos que los atienden.
Miami-Dade es el epicentro con 37.961 casos y 1.000 decesos por la COVID-19, tras haber sumado a la cuenta en las últimas 24 horas 1.141 casos y nueve muertes.
Los hospitales del sistema de salud pública Jackson Health System de Miami están sintiendo el repunte de casos con fuerza y a partir del lunes de la próxima semana empezarán a restringir las intervenciones quirúrgicas que no sean urgentes, algo que no sucedía desde la fase inicial de la pandemia.
La decisión, anunciada por el director ejecutivo del Jackson Heath System, sigue a un periodo de dos semanas en el que el número de pacientes en los hospitales y las unidades de cuidados intensivos se ha duplicado.
Como consecuencia, también van a reforzar la plantilla de enfermeras con 78 nuevas contrataciones, según dijo Migoya a la Junta municipal de Miami-Dade.
El Departamento de Salud de Florida no informa desde hace días del nivel de ocupación de los centros médicos del estado en la web especial en la que vuelva la información diaria sobre la COVID-19.
MIEDO AL COLAPSO HOSPITALARIO
Sí lo hace otra web que utiliza datos oficiales y de los propios hospitales y que esta mañana indicaba que de las 6.000 plazas de Unidades de Cuidados Intensivos existentes en Florida estaban vacantes 1.201.
Según la web de la Comunidad, en el hospital más grande del Jackson Health System, el Memorial (centro de Miami) quedan libres 445 camas (35 en la UCI), en el situado en la zona norte de la ciudad hay 105 (2), y en el del sur de Miami 53 camas (12 en la UCI).
Según el Departamento de Salud, el miércoles se conocieron los resultados de 45.366 pruebas de la COVID-19 y de ellos un 15,04 % fueron positivos, un porcentaje muy superior a lo que recomiendan los expertos para poder reabrir la economía (5 % o menos).
Florida comenzó su reapertura en mayo y ya está en la fase dos de tres, sin que el gobernador Ron DeSantis tenga intenciones de dar marcha atrás, como ha manifestado reiteradamente .
Ni siquiera considera declarar obligatorio el uso de mascarillas en espacios públicos en todo el territorio floridano.
Esa medida rige en Miami-Dade y en muchos otros condados y ciudades, incluso con multas para los infractores.
Las autoridades del condado miamense han decidido restringir los horarios de los restaurantes y piscinas y la venta alcohol, así como cerrar las playas durante el festivo del 4 de julio.
De igual forma, las autoridades de Miami Beach anunciaron este miércoles que de nuevo impondrán el toque de queda, entre las 12:30 y la 6 de la mañana.
Por detrás de Miami-Dade se sitúa su vecino Broward como punto caliente de la COVID-19, con 531 nuevos casos y dos muertes hoy, que ponen la cuenta en 16.155 y 385.
Palm Beach sumó 297 casos y dos muertes y ahora acumula 14.447 contagios y 512 decesos.
Fuente: Contacto hoy