La Habana, 29 ago (EFE).- Cuba registró este sábado otros 59 casos de COVID-19, la gran mayoría en La Habana, donde además se confirmaron dos nuevas muertes por coronavirus, que ya deja un acumulado de 94 fallecidos y 3.925 positivos en la isla.
Los dos habaneros, de 78 y 56 años, padecían enfermedades crónicas y ambos murieron luego de sufrir paradas cardiacas la víspera, explicó el director de Epidemiología del Ministerio cubano de Salud Pública (Minsap), Francisco Durán.
Estas cifras pueden parecer poco significativas en comparación con los datos internacionales, pero para nosotros son altas, señaló el doctor Durán en su comparecencia televisiva diaria, en la que volvió a llamar la atención sobre la “compleja” situación de la capital.
La Habana, la más poblada de Cuba y considerada el epicentro de la epidemia en el país casi desde el comienzo, acumula 45 de los 49 casos de trasmisión local reportados hoy, repartidos en doce de sus quince municipios. En la urbe se detectaron 513 de los 645 de los positivos de las últimas dos semanas.
Esta dispersión y el rápido aumento de los contagios diarios, con cifras similares al primer pico de la enfermedad en abril pasado, provocaron la cancelación la reapertura en la ciudad y un endurecimiento de las restricciones para tratar de detener los rebrotes.
MÁS PRUEBAS
Los casos de este sábado se detectaron entre 5.698 muestras PCR completadas la víspera, uno de los mayores números realizados hasta el momento en la isla, que acumula un total de 388.194, según estadísticas actualizadas del Minsap.
Solo en La Habana se analizaron unas 4.000 muestras, una cifra que el doctor Durán aseguró que buscan “seguir incrementando para diagnosticar, aislar y tratar oportunamente al 100 % de las personas que están infectadas en el país”.
Los 59 nuevos confirmados -todos cubanos- se mantienen en el rango de los reportes de esta semana, con datos que oscilan entre los 15 y los 60 contagios.
De los 49 casos locales, 43 son contactos de otros enfermos y en seis no se precisa la fuente de infección.
Además de los 45 pacientes habaneros, el Minsap informó sobre nuevas infecciones en las cercanas Artemisa y Matanzas, con una cada una, y dos en la central provincia de Ciego de Ávila.
En hospitales cubanos permanecen ingresadas 1.024 personas, entre ellas 556 confirmados: cinco en estado crítico, 17 graves y el resto con evolución estable, según el parte diario oficial, que no reportó la procedencia de los casos importados y sigue sin informar el número de personas aisladas en sus hogares.
Con las 51 altas médicas de hoy, en Cuba ya se han recuperado 3.273 pacientes, lo que significa el 83,4 % del total.
LA HABANA CERRADA
Cuba sufre una nueva ola de COVID-19 poco más de un mes después de declarar controlada la enfermedad y celebrar dos días sin nuevos contagios a fines de julio.
Los rebrotes llevaron a la cancelación de la reapertura en La Habana después de permanecer estancada en la fase 1 de reapertura durante unas cuatro semanas, mientras el resto del país avanzaba de la segunda a la tercera y última etapa de desescalada.
La rápida expansión de los casos en la zona occidental, y algunos hasta provincias centrales y orientales que no reportaban infecciones en meses, provocó que las autoridades cubanas limitaran el tránsito entre regiones.
Ante esta situación y el reinicio inminente del curso escolar en el país -a excepción de La Habana-, el Gobierno decidió aumentar las restricciones durante los primeros quince días de septiembre en la urbe habanera, en la que ya están suspendidos el transporte público y la gran mayoría de los servicios.
Sin decretar aún el confinamiento obligatorio, las autoridades impondrán un toque de queda nocturno en la ciudad, en la que se restringirá también durante el día la circulación de personas y coches, ya sean privados o estatales.
Las entradas y salidas de La Habana estarán permitidas solo bajo condiciones excepcionales y hasta el trasiego entre municipios estará limitado. EFE
Fuente: Contacto hoy