Jerusalén, 29 oct (EFE).- El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, relacionó hoy el asesinato hace 25 años por un radical judío del entonces jefe de Gobierno, Isaac Rabin, con la “incitación a la violencia” que asegura hoy “persiste” hacia él y su familia.
“Debemos condenar enérgicamente cualquier expresión de violencia política o de otro tipo por parte de cualquier ideología”, declaró en referencia al creciente descontento ciudadano que pide su dimisión con duros mensajes hacia su mandato.
“Una lluvia de balas en una plaza de la ciudad nunca fue ni podrá reemplazar una decisión tomada por la gente en las urnas”, remarcó durante la sesión especial en el Parlamento israelí que conmemoró hoy la muerte de Rabin, el 4 de noviembre de 1995 (a partir de esta noche, según el calendario hebreo).
El jefe de Gobierno israelí se enfrenta desde marzo a un aumento del descontento ciudadano y una pérdida de popularidad por su juicio por corrupción y la gestión de la pandemia con masivas protestas semanales.
Netanyahu ha presentado varias demandas por amenazas, incluida una denuncia contra un soldado israelí que fue detenido tras publicar en la red social de Facebook que la solución es “tumbar a Bibi”: “Ya sucedió en el pasado que un primer ministro fue tumbado por una razón injusta”, escribió en referencia a Rabin.
El primer ministro israelí ha culpado a los medios y a la izquierda de alimentar las masivas manifestaciones y les señala además por el “contexto de amenazas en el que está envuelto”.
El presidente de Israel, Reuvén Rivlin, alertó hoy de la polarización que vive Israel: “El país se divide como el Mar Rojo entre dos campos (políticos) y el odio burbujea bajo nuestros pies”, lamentó.
Rabin fue asesinado por el ultraderechista Yigal Amir al final de una masiva manifestación en Tel Aviv a favor de los Acuerdos de Paz de Oslo, que el entonces primer ministro impulsó y firmó poco antes con el histórico dirigente palestino, Yaser Arafat, fallecido en 2004. EFE
fuente: Contacto hoy