La Comisión de Quejas y Denuncias del Instituto Nacional Electoral (INE) ordenó al presidente Andrés Manuel López Obrador que se abstenga de difundir en sus conferencias matutinas, propaganda gubernamental y expresiones de contenido electoral hasta que se celebren los comicios del 6 de junio próximo.
Al resolver dos quejas del PAN contra el mandatario, los consejeros determinaron que el titular del poder ejecutivo federal se ha pronunciado de manera reiterada sobre temas y aspectos prohibidos por la Constitución en al menos 29 de 36 ruedas de prensa analizadas.
En más del 80 por ciento de las ruedas de prensa, hizo manifestaciones que pueden catalogarse como propaganda gubernamental o información que pudiera influir en las preferencias electorales, puntualizaron.
Destacaron que López Obrador no se ajustó a los límites y parámetros previstos en los artículos 41 y 134 de la Constitución, así como a los criterios de la Sala Superior del Tribunal Electoral sobre este tipo de actos.
De la revisión de las conferencias, señalaron que se observa un patrón de conducta reiterado y sistemático que puede afectar de modo grave la equidad de la contienda, pues en la mayoría de ellas se abordaron temas electores.
Dado lo anterior, estimaron que existe una base cierta y objetiva que permite considerar la inminente continuación o repetición de este tipo de actos en los día venideros, cuando las campañas están en la recta final y se avecina la veda electoral, así como la jornada comicial.
Ante esa situación, los integrantes de la Comisión estimaron necesario, justificado y proporcional emitir medidas cautelares en la modalidad de tutela preventiva. De esta manera, se ordenó al presidente que, durante lo que resta de las campañas electorales y hasta el día de la jornada, se abstenga de difundir logros de gobierno, incluyendo programas sociales, obra pública, y cualquier tipo de manifestación que pueda incidir en las preferencias electorales de la ciudadanía.
Recomendaron al mandatario dejar de abordar temas relacionados con las prerrogativas de los partidos políticos y su vida interna, manifestarse a favor o en contra de candidatos, coaliciones y plataformas electorales, y referirse a estrategias electorales de cualquier fuerza política.
También le pidieron evitar hablar sobre encuestas de intención de voto y cualquier mensaje que busque o genere tener un efecto persuasivo y de influencia en el electorado y que pueda poner en riesgo los principios y valores tutelados por la Constitución.
La Comisión declaro improcedente cancelar la difusión de las conferencias ya que dicho ejercicio, por sí mismo, no contraviene norma o disposición jurídica alguna.
Fuente: La Jornada