Actualmente existe una pobreza general en la entidad, pues no hay recursos y las familias se ven afectadas por esta situación, señaló Jaime Rivas Loaiza, secretario de Bienestar Social del estado, al manifestar que ante esta situación, al concluir la veda electoral se reactivarán todos los programas para apoyar a la población que enfrenta esta situación.
Dijo que se trabajará en coordinación con todas las dependencias estatales y federales para abatir este flagelo que golpea a Durango, pues el objetivo es que en los siguientes días se reactivarán los distintos programas que lleva a cabo la dependencia, pues la población en general se ha visto muy afectada por los efectos económicos de la pandemia.
Agregó que, de hecho, en todo el estado se han sentido los efectos económicos de la pandemia, pues se han sentido tanto en el medio rural como en las zonas urbanas, pues en esta ciudad existen cinturones donde se puede ver que se acentuaron las condiciones de pobreza en las familias que ya enfrentaban carencias.
Con respecto a los índices de pobreza en la entidad, dijo que la Secretaría se encuentra en espera de que la Coneval ayude a medir la situación que se presenta actualmente, para enfocar las acciones de apoyo a los polígonos donde se acentúa más este problema.
“Confiamos en que vamos a retomar el tema y con los recursos que tenemos vamos a ir avanzando, tenemos de junio a diciembre para trabajar de manera muy intensa”, dijo textualmente el secretario, al recordar que el 2020 fue un año muy complicado a causa de la pandemia, así como parte de este 2021.
Manifestó que no hay economía al seno familiar, hay una pobreza general, “en todos los rubros, al no haber recursos, dinero, hay pobreza dentro de la familia”, dijo textualmente, para manifestar que se trabajará de manera coordinada con las dependencias del estado y federales para abatir este flagelo que golpea a la entidad.
Reconoció que la derrama económica que se aplicaba en los distintos programas sociales, se detuvo a causa del proceso electoral, pues solamente en el caso del programa de Uniformes Escolares se autorizaron 160 millones de pesos, pero al no ir los niños a clases, no se aplicaron estos recursos y no hubo trabajo para maquiladores y empresarios que hacían los uniformes, por eso se detuvo la derrama económica, aunque como este hay otros casos.
Fuente: Contacto Hoy