Una radiografía del tórax reveló el terrible padecimiento que sufría la mujer. Presentó una queja contra los médicos por haberle mentido

Una mujer británica de 23 años sufrió de una fuerte tos durante cinco meses, tiempo en el que también bajó de peso por lo que un médico atribuyó su padecimiento por ser una más de las víctimas de la pandemia de Covid-19 que azota el mundo. La mujer creía que se había enfermado de un resfriado en julio después de presentar un cuadro de tos en el pecho.

Chloe Girardier insistió en que le dieran una cita médica en los servicios médicos del estado, pero le era negada ya que le dijeron que debido a que solo tenía una tos, no era elegible para que le dieran una cita urgente por la prioridad en la atención a pacientes Covid-19.

Por lo anterior, Chloe comenzó a preocuparse, sobre todo por la reacción de la gente a su alrededor que le preguntaban si ya se había hecho la prueba para identificar si tenía coronavirus, “Fue frustrante porque todavía existen otras enfermedades y la tos no es solo un signo de Covid”, señaló la mujer citada en NY Post.

Tras por fin conseguir una cita médica, la trabajadora esencial (como la llaman en el Reino Unido) consiguió solo que le dieran antibióticos, inhaladores y tabletas contra el reflujo ácido; sin embargo, no tuvieron efectos para contrarrestar la tos y su pérdida de peso.

Chloe descubre que no era Covid-19

Luego de siete citas médicas donde Chloe solo veía cambios en su peso y talla, exigió al médico que le realizara una radiografía del tórax para conocer qué le provocaba la intensa tos que la mantenía enferma desde hace casi medio año.

El resultado de la radiografía reveló el verdadero y terrible mal que le provocaba a la tos a la mujer y la hacía bajar de peso, el médico encontró una masa en el pecho de Chloe de poco más de cuatro pulgadas. El diagnóstico que por fin dio el galeno fue que la mujer padece cáncer.

Chloe sufre del linfoma de Hodgkin, un cáncer poco común que causa síntomas permanentes como la tos recurrente, además de la pérdida de peso, picazón en la piel y fiebre. Los doctores que la atienden programaron el inicio de su quimioterapia cinco días antes de la Navidad, el 20 de diciembre.

Ante el diagnóstico, la mujer de 23 años presentó una queja contra los médicos al asegurar que la engañaron durante mucho tiempo; no obstante, es optimista para lograr su pronta recuperación.        

“Había oído hablar de este tipo de cáncer antes porque conocía a alguien que lo había tenido y, afortunadamente, es uno de los cánceres más fáciles de tratar, así que estoy seguro de que me recuperaré por completo”.

Agregó que si los médicos hubieran encontrado el cáncer más rápido, no necesitaría una quimioterapia tan intensa. “Me he preparado para la quimioterapia, pero la parte más difícil para mí será perder el cabello”, aseguró.

FUENTE: CON INFORMACIÓN DE “EL HERALDO”.