- También cuenta con profesores especializados que atienden a personas con discapacidad
- Israel es un ejemplo de disciplina, constancia y felicidad en su escuela y con su familia
“Para mi hijo y para mí, nadar en la Alberca 460 ha sido de gran apoyo para su felicidad, porque ahora es más desenvuelto en su escuela y con sus amigos, con su familia”, indicó la señora Guillermina Piña, mamá de Israel Reyes Piña, usuario con Síndrome de Down.
Es en la única alberca que lo aceptaron, en ninguna otra dan clases a personas con discapacidad como la de Israel y por ello la alegría que siente al acudir a nadar contagia a todos los demás usuarios, agregó su mamá.
Esta alberca, al igual que la Alberca 450 y la José Revueltas, forma nadadores competitivos y apoya en el desarrollo de su coordinación, seguridad en su vida diaria y también es terapia para su desarrollo mental, física y motricidad, destacó por su parte el director del INDEHVAL, Giovanni Rosso Güereca.
Por ello, la señora Guillermina Piña está muy agradecida con el Instituto para el Desarrollo Humano y Valores (INDEHVAL), ya que tiene personal preparado para atender a esta población vulnerable como es la maestra Ruth Barraza.
Pero Israel no sólo practica natación, también acude a la escuela de box que el INDEHVAL tiene en el gimnasio El Refugio, en el que también aprende disciplina y constancia, dos cualidades que ha desarrollado a lo largo de dos años.
