Tegucigalpa, 4 nov (EFE).- Las lluvias en las regiones norte y caribeña de Honduras se siguen intensificando a medida que se acerca Eta, que este miércoles se degradó a tormenta tropical después de haber entrado el martes como huracán categoría 4 a Nicaragua, informó una fuente oficial en Tegucigalpa.
“Se aclara que a pesar del descenso de categoría, las lluvias cobrarán mayor intensidad y pueden llegar a ser catastróficas”, indicó la estatal Comisión Permanente de Contingencias (Copeco) en un comunicado.
El organismo de protección civil hizo un nuevo llamamiento a la población a “extremar” las medidas de precaución por los efectos del fenómeno, que hacia las 06.00 hora local (12.00 GMT) se localizaba unos 75 kilómetros al este de la frontera con Nicaragua, en el municipio de Trojes, El Paraíso.
Según la Copeco, la tormenta se desplaza a una velocidad de 13 kilómetros por hora sobre Nicaragua, con vientos máximos sostenidos de 95 kilómetros por hora, y “se prevé que alrededor del mediodía el centro de este sistema podría llegar a la frontera hondureña”.
El informe oficial señala que continúa la advertencia de huracán para sectores de la costa de Nicaragua, la frontera con ese país en el sector de Sandy Bay, y vigilancia de tormenta tropical de la costa noreste de Honduras desde Punta Patuca, hasta la frontera común entre los dos países.
Eso significa que, condiciones con vientos superiores a los 175 kilómetros por hora, son probables en las áreas que el fenómeno ejerce influencia dentro de las próximas seis horas, con oleaje que podría alcanzar hasta los dos metros de altura, indicó la Copeco.
Para hoy se pronostican lluvias y chubascos intermitentes, dispersos acompañados de actividad eléctrica aislada, con acumulados de 120 y 140 milímetros, con máximos de 150 a 200 en las montañas.
Las precipitaciones serán resultado de la interacción de los vientos acelerados del norte, con las bandas nubosas y la circulación asociada al huracán Eta.
La Copeco pronostica que la posible trayectoria que seguiría hoy la tormenta es a través del territorio nicaragüense, donde se espera que pierda intensidad en sus vientos, hasta llegar a los departamentos del oriente hondureño (Gracias a Dios, Olancho y El Paraíso).
Honduras mantiene en “alerta roja” (evacuación) siete departamentos del norte, oriente y Caribe, mientras que en los 18 restantes rige “alerta amarilla” (vigilancia).
DESBORDAMIENTOS DE RÍOS Y DAÑOS MATERIALES
El fenómeno, que comenzó a ejercer influencia en Honduras desde el lunes, ha dejado varias regiones incomunicadas, al menos en los departamentos de Gracias a Dios, Colón, Atlántida, Cortés y Yoro, por deslizamientos, inundaciones y daños a puentes.
A nivel nacional, más 3.000 personas habían sido evacuadas hasta primeras horas de hoy, pero esa cifra se irá incrementando por las inundaciones, según han advertido autoridades locales.
En el sector de El Progreso, departamento de Yoro, norte del país, el caudaloso río Ulúa, que nace en el occidente, está a punto de desbordarse y meterse a la ciudad, que ya tiene varios barrios inundados por otras fuentes cercanas.
En la aldea de Planes, departamento de Colón, en el Caribe, entre otros daños, uno de los ríos que cruza por el sector arrastró hoy una veintena de tumbas del cementerio, que está situado a orillas de la fuente.
Muchas familias afectadas están comenzando a buscar refugios en partes altas ante la advertencia de que las lluvias continuarán al menos hasta el viernes.
Escuelas y otros espacios públicos en sitios seguros están siendo habilitados para atender a damnificados por la tormenta tropical Eta.
HONDURAS CON DOS EMERGENCIAS
La tormenta Eta ha sido la causante de una segunda “alerta roja” para Honduras, que desde marzo vive la emergencia, con toque de queda y circulación limitada de personas, por la pandemia de covid-19, que ha dejado más de 2.600 muertos y los contagios ya rozan los 100.000.
A raíz de los daños que está dejando Eta en el país, se han paralizado las pruebas de laboratorio PCR para detectar nuevos casos de covid-19 en la mayoría de los departamentos, informó el martes el estatal Sistema Nacional de Gestión de Riesgos (Sinager).
Hasta ahora solamente se ha registrado la muerte de una niña de trece años en una aldea cercana a San Pedro Sula, en el norte del país, a causa de un deslizamiento de tierra.
En Tegucigalpa, situada en la región central del país, las lluvias han ido de leves a moderadas, pero no se descarta que se intensifiquen a partir de hoy, cuando serán más afectadas las regiones del centro y oriente. EFE
Fuente: Contacto hoy