París. La presunta presencia de un artefacto explosivo a bordo de un avión procedente de Chad movilizó este jueves a las autoridades francesas, que aislaron el aparato en París, hasta que las pesquisas mostraron que fue una falsa alarma.
“No hay ningún artefacto explosivo” a bordo del avión de Air France, que fue aislado a su llegada al aeropuerto de Roissy-Charles-de-Gaulle, indicó el ministro de Interior, Gérald Darmanin.
Según una fuente del aeropuerto, durante el vuelo un hombre consiguió conectarse a la frecuencia de radio de los pilotos y emitió una amenaza de bomba.
“El comandante recibió una llamada que le informó de una bomba a bordo, y que le dijo que tenía que aterrizar en Argelia”, explicó a la AFP una fuente cercana al caso.
“El piloto informó a la compañía y el avión fue escoltado por un (avión caza) Rafale hasta Roissy”, añadió la fuente.
A su llegada a París, el avión fue trasladado a una zona especial del aeropuerto. Un total de 52 pasajeros fueron desembarcados y su identidad fue inspeccionada, explicó el ministerio.
El incidente provocó la convocatoria de una célula interministerial de crisis, informó el ministerio de Interior.
El GIGN, una unidad de élite de la gendarmería, fue movilizada durante el incidente.
Fuente: La Jornada