En diciembre de 2018, el día 22, el volcán Anak Krakatoa (Estrecho de Sonda) entró en erupción y provocó un tsunami. Azotó a las zona costera de Bantén y Lampung, en Indonesia. La dimensión de la catástrofe no se estableció hasta el 10 de enero 439 fallecidos, 7200 heridos y 15 desaparecidos.
Hace unas horas la vuelto a rugir el Anat Krakatoa con una columna de cenizas que alcanzan los 500 metros. Los expertos hablan de la actividad más violenta desde la citada de 2018, aunque por fortuna hasta ahora no se registran vícitmas. Por ahora se mantiene el nivel dos de alarma, el segundo en una escala de 4.
El registro históricos de muertes provocadas coloca al Anak Krakatau y la zona volcánica en la que se ubica como una de las más mortales del mundo. El 27 de agosto de 1883 sucedió la catastrófica erupción del Krakatoa. El tsunami que generó provocó olas de 22 metros que se cobraron más de 36.000 vidas.
El volcán desapareció en gran medida bajo el mar, pero en 1927 comenzaron las erupciones volcánicas de nuevo bajo el mar. Así, entre 1928 y 1930 apareció la isla Anak Krakatau. Las erupciones periódicas han continuado desde entonces, con erupciones recientes en 2009, 2010, 2011 y 2012, y un colapso importante en 2018. En 2017, la altura de Anak Krakatau se estimó que era más de 400 m sobre el nivel del mar; tras un colapso en diciembre de 2018, la altura se redujo a 110 metros.
Fuente: Contacto hoy