Tras sufrir el peor desempeño económico en una década el año pasado, el secretario de Hacienda, Arturo Herrera, ve motivos para ser más optimistas respecto a México, la segunda economía más grande de América Latina, en 2020.
En su primera entrevista con los medios en inglés este año, Herrera dijo que después de casi una década de expansión desde la crisis financiera global, la contracción del 0.1 por ciento del año pasado fue más natural y en línea con la decepcionante actividad económica en todo el mundo. Ahora, las cosas se ven mejor.
Su argumento apunta a que la inflación y los niveles de deuda están bajo control, el peso se mantiene estable y Petróleos Mexicanos (Pemex) ha frenado una disminución de la producción. El principal impulso para el país proviene de la ratificación del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
“El desempeño de la economía mexicana es muy diferente con este acuerdo”, declaró a Bloomberg News en el Palacio Nacional. “Esta es una de las grandes ventajas que tenemos ahora”.
Las cadenas de producción pueden invertir más en América del Norte en función de la certeza generada por el pacto comercial, especialmente porque los competidores en Asia están asediados por guerras comerciales y una crisis sanitaria (coronavirus), precisó.
La dependencia federal comandada por Herrera incluso ha mantenido su pronóstico de crecimiento del 2 por ciento para el año, aunque no dirá si eso cambiará cuando informe una propuesta de presupuesto preliminar al Congreso en abril.
Su optimismo no es totalmente compartido por los expertos. Los economistas han ido reduciendo constantemente las estimaciones de crecimiento del país para 2020 a un promedio que apenas llega al 1 por ciento frente al 1.7 por ciento de hace seis meses, con un pronóstico de Bank of America, que prevé una débil expansión al 0.5 por ciento.
Inflación y tasas
Un área que probablemente proporcionará un mayor estímulo es la política monetaria. México “claramente” tiene espacio para seguir recortando tasas de interés después de alcanzar su objetivo de inflación el año pasado, indicó Herrera.
“No soy el único que lo dice. Es algo que se dice por el director del Hemisferio Occidental del Fondo Monetario internacional (Alejandro Werner)“, expuso.
“Si nos fijamos en los analistas, también están descontando algo como esto”, precisó.
El Banco de México (Banxico) ha estado bajando su tasa de interés de referencia desde agosto del año anterior, debido a una disminución de la producción petrolera y la incertidumbre sobre si las políticas del presidente Andrés Manuel López Obrador estancaron la actividad económica.
Incluso después de reducir la tasa referencial en 125 puntos base desde agosto pasado, México tiene una de las más ajustadas a nivel mundial.
Los analistas esperan que el Banco Central, que tiene independencia operativa del Gobierno, recortará la tasa en el resto de 2020, terminando el año en 6.5 por ciento.
Los inversores han reducido las estimaciones de crecimiento de México para 2020 a 1 por ciento desde 1.7 por ciento hace seis meses después de que datos preliminares mostraron que la economía se contrajo el año pasado.
Werner declaró el mes pasado que México tiene “espacio significativo” para mantener el recorte a las tasas de interés para impulsar el crecimiento, a fin de impulsar el crecimiento, señalando que otros de los países latinoamericanos han reducido los costos de endeudamiento recientemente.
La fortaleza del peso mexicano, que el lunes alcanzó su nivel intradía más alto en casi un año y medio, es explicado por factores que incluyen el gobierno fiscal responsabilidad y las tasas de interés relativamente altas , señaló Herrera.
También reiteró el compromiso del Gobierno sobre la estabilidad de la moneda.
El secretario, además, reiteró el compromiso del gobierno con una moneda ‘estable’ y ‘flexible’.
“Es muy riesgoso para alguien meterse con política de cambio”, dio a conocer. “A México le costó mucho trabajo entender y nosotros somos muy respetuosos. Con el tipo de cambio no se juega”.
Fuente: El Financiero